Existe la teoría de que las personas tenemos «tres cerebros». 🧠x3
Cada uno tiene su función, y a su vez, podemos ir desde el más básico hasta el más «pro» como si estuviéramos subiendo una escalera (aunque a veces nos cueste).
Ahora bien, para entender cómo una flor llegó a convertirse en flor, primero tenemos que explicarlo por partes. Acá es igual…
❣️🌱🌻👇
1) La semilla ❣️
El cerebro reptiliano es el más primitivo. Se encarga de nuestra supervivencia y estudia el entorno constantemente. Cuando percibe un peligro, por ejemplo, nuestra amígdala envía respuesta de lucha o huída, y como está conectada al sistema hormonal nos da adrenalina y cortisol.
2) El tallo 🌱
El cerebro emocional (o sistema límbico) es el que trabaja emociones más complejas, como por ejemplo: felicidad, tristeza, amor (y sí que son complejas eh😶🌫️). Nos ayuda a conectar con los demás, y también nos ayuda a tomar decisiones.
3) La flor 🌻
Cerebro racional (o neocórtex) nos permite hacer análisis lógicos y tomar decisiones más efectivas. Incluye una amplia paleta de emociones🎨, como la calma, la satisfacción, la conformidad… Nos abre la puerta a la introspección, y reconoce indicadores útiles que los demás cerebros no pueden leer.
⬆️Nuestra clave para la IE⬆️
Miralo en una imagen:
Es posible escalar de uno en otro (si la situación nos lo permite).
Porque si nos persigue un león, no vamos a poder sentarnos a meditar para calmarnos en el momento, obvio.😋
Pero si estamos a punto de estallar, antes de que nuestros cerebros más básicos tomen el panel de control 🕹️y nos gane el impulso, existen distintas técnicas para ordenarnos y empezar a subir la escalera hasta llegar al neocórtex.
Así podemos evitar que luego nos arrepintamos, o que lastimemos a alguien con nuestras palabras cargadas de veneno emocional. 💢💥
Esta escalera la podemos llamar tálamo. Es quien dirige las señales para tener noción completa de lo que ocurre, y así emitir una mejor respuesta.
¡Hay que usarla! 🪜
7 tips:
- Hacé introspección para comprender qué te activa esos niveles. Para eso necesitás tiempo a solas, entender lo que sentís y los motivos, así podés expresarlos de la mejor manera y tomar buenas decisiones.
- Prestá atención a tu cuerpo: tiene un lenguaje no verbal. Nuestros rasgos, expresiones corporales… todo nos ayuda a entender la intensidad emocional que estamos manejando (apretar la mandíbula, cerrar los puños, «nudo» en el estómago).
- Buscá alguien a quien admires en cuanto a manejo de emociones. Puede ser alguna persona que sepa mantener la calma, o sea paciente. Preguntale cómo lo hace… (y después pasá el tip 😅).
- Lee libros, los famosos «autoayuda» en mi opinión son los mejores. Hay para todos los gustos y colores. Tengo muchos para recomendarte si necesitás sobre algún tema en específico (escribime).
- Meditá, o hacé ejercicio. Lo que más te guste y te sirva para conectar con vos y tocar tierra.
- Salí de la situación que te pone nervios@ por un momento. Buscá un vaso de agua, andá a dar una vuelta a la manzana, escuchá música que te guste por unos minutos. El famoso «necesito bajar un cambio» que nos ayuda a encontrar el equilibrio.
- Pensá objetivamente lo que pasó o está pasando. Estamos cargados de subjetividad y eso nos nubla la vista. También tenemos sesgos, y tendemos a suponer cosas. Lo mejor es preguntar si algo no nos resulta claro, o pedir otro punto de vista que nos ayude a ver otras realidades.
En este proceso, es importante que no te mortifiques cuando cometés un error.
Hay que prender, y a veces eso conlleva cometerlos. Tenemos la mala costumbre de castigarnos una y otra vez… pero el juicio es uno, no se repite (a menos que vuelvas a cometer el mismo).
Y vos… ¿Tenés algún tip más que te ayude a escalar de cerebro en cerebro y no estallar?
Compartilo en comentarios, lo quiero leer!!!!! 🤩
Pronto seguiremos hablando sobre los tipos de emociones y el secuestro de la amígdala. ¡Sí, su secuestro!
¡Nos leemos pronto!
Gracias